Conocenos

Corría el año 2008, Dios nos envió como familia a pastorear una iglesia. Junto a mi esposa Nancy y nuestro pequeño milagro Eric en su vientre, llegamos a Lanús, llegamos a la iglesia del Reencuentro (anexo de la iglesia Reencuentro de Calzada) allí nos recibieron un grupo de hermanos que lucharon muchísimo en oración, en trabajo, para que la obra de Dios siguiera en pie.

En ese entonces, se encontraban en un pequeño local… un grupo de 30 valientes y un sueño que parecía muy lejano… vamos a levantar una iglesia de reino, una iglesia que crezca e impacte la ciudad con el evangelio

Fueron pasando los años, aciertos, errores, logros y fracasos de los cuales aprendimos. Siempre, siempre, la fidelidad de Dios estaba con nosotros.
Fuimos creciendo; el lugar que antes nos parecía grande para la cantidad que éramos nos quedó diminuto. Nos encontramos con un nuevo desafío: Alquilar un lugar más grande. Así que con fe nos trasladamos a la Avenida San Martín, nos parecía enorme. Y pusimos todo nuestro esfuerzo, trabajamos todos juntos para hermosear ese lugar. Pusimos manos a la obra, en los pequeños detalles, desde la limpieza, hasta los arreglos más grandes, siempre trabajamos con excelencia como para el Señor, incluso pintamos ladrillo por ladrillo, mientras declarábamos que ese lugar iba a ser nuestro algún día.

Seguimos creciendo, avanzando. Y en el 2012 nos constituimos como iglesia autónoma. Un paso muy importante que dimos junto a nuestro Señor. Ese mismo año nos trajo una palabra profética que marcó un antes y después en nuestra historia: están llamados a levantar obras, tener varias iglesias, un Ministerio

Como siempre, le creímos al Señor, si su presencia iba con nosotros avanzaríamos hasta donde Él nos dijera. ¡Así que marchamos hacia adelante anhelando lo que estaba por venir!

Una mañana de bautismos. Dios nos bendijo con el abrazo a una nueva congregación, la iglesia Jesús pan de vida; otra iglesia que estaba sin pastor. Nos reunimos con otro grupo de 25 valientes que sostuvieron la obra junto con las fuerzas del Señor, y siguió en pie frente a todas las tempestades. Siguió creciendo el sueño: Levantarnos, crecer y avanzar en el nombre de Jesús.

La tarea y el esfuerzo se duplicaron, pero así también las bendiciones. Seguimos predicando a Jesús, restaurando almas, consolidando familias, ministrando los dones y levantando nuevos obreros. ¡Dios es fiel!

Y la añadidura de dios no se hizo esperar, tuvimos un encuentro con Walter y Marina Acuña, los pastores de la iglesia del Dios Viviente en Chajari, Entre Ríos. Un nuevo inicio. Un poco más lejos, pero con el mismo fuego del Señor.

Llegó el año 2015, ese año fue el presbiterio de la Pastora Nancy. Y en octubre en ese teatro tan especial, nació lo que Dios había estado gestando: Un ministerio, Acercate a Jesús.

Fuimos avanzando en ese camino, y seguimos cada día descubriendo nuestra identidad.
Se sumaron nuevos presbiterios y ordenaciones a más pastores: Daniel y Natalia López, Walter y Marina Acuña, evangelistas, salmistas, líderes generales, grupos de crecimiento, líderes de servicio con sus equipos, obreros que todos los días siembran semillas de fe para que el reino se extienda.

Las obras crecieron a pasos agigantados. Dios nos llamó a ser un ministerio de sembradores también, y las semillas dieron sus frutos. Pudimos comprar el edificio en la Avenida San Martín, Lanús (aquello que soñamos mientras pintábamos los ladrillos, se hacía realidad) Seguimos proyectando, soñando con nuevas aulas y salones. Demolimos y ampliamos el predio en la calle Pilcomayo con el sueño de un auditorio, poli funcional.

Chajarí extendió sus estacas y ensanchó el templo. Y siguen adelante con muchos más proyectos.
Esto es lo que somos, somos redimidos, somos gente a la que Jesús llamó y cautivó, fuimos y seguimos siendo cambiados por su presencia, impulsados por su espíritu, locos para el mundo pero llenos del poder de Dios y por eso avanzamos en cada sueño que Él pone delante nuestro. Queremos seguir viendo niños, jóvenes, matrimonios y familias transformados por Dios.
Somos los que no vamos a parar de anunciar que Cristo nos ama, que hay un salvador y un camino, somos una gran familia de fe, somos un solo cuerpo, una misma visión, somos uno en Cristo, somos Acercate a Jesús.